CURSO ERASMUS +: “Boosting Creative thinking and problema solving” Roma 04-09/12/2023 Sandra Leal Viana
Pienso que participar en un curso para mejorar
la labor profesional y, además, conocer una de las ciudades más bellas del mundo
es una oportunidad única; ya que este aprendizaje no solo se refleja en el aspecto
laboral, sino también nuestros conocimientos personales.
El curso que me interesó mucho fue “Boosting Creative thinking and problema solving” (impulsar el pensamiento creativo y la resolución de problemas), impartido en Roma por Europass Teacher Academy, desde el 4 al 9 de diciembre de 2023, en horario matutino.
Me atrajo por dos razones, la primera es que en
educación siempre tenemos que estar reciclándonos en nuevas metodologías más
atrayentes y eficaces a la hora de impartir clase; y por otro, tenía lugar en
una ciudad de la que estoy enamorada.
El curso comenzó el lunes 4 con nuestra
coordinadora Mafalda Morganti, en las instalaciones de un centro de
exposiciones fotográficas, llamado “Librería Officine Fotografiche”, situado a
dos paradas de metro del Coliseo.
Éramos 12 participantes/alumnos de diferentes países:
Malta, Alemania, Chipre y España. Al ser de diferentes países, el curso se
impartió en inglés. A cada participante nos entregaron unos regalos de cortesía
desde la academia, buen detalle; y, además, se nos hizo entrega de una tarjeta
Romapass, que consiste en que durante tres días (comienza el día que la usas
por primera vez) dos museos o visitas gratuitas entre Coliseo, Foros Palatino e
Imperial, Mercado de Trajano, Museos Capitolinos, Termas de Caracala, …; las
siguientes visitas a precio reducido y el transporte público gratuito. (Estas
tarjetas se consiguen en la Oficinas de Turismo, al precio de 52€)
Comenzamos la primera sesión con una presentación de cada participante con un PowerPoint, para que el resto de compañeros conociesen los lugares y los centros educativos donde llevamos a cabo nuestra labor docente. Además, con ello, entendimos el sistema educativo de cada país.
Tras las presentaciones, comenzaron los juegos
para que sacásemos la creatividad que llevamos dentro y nos cuesta, tanto
expresarla, como ponerla en funcionamiento sin miedo.
Definimos creatividad con cartas con dibujos, según cada uno la entiende. Desde monstruos, hasta herramientas o pájaros; para llegar a una definición única, en la que la dedicación constante y el poner en marcha ideas sin miedo, deben ser las principales herramientas de la creatividad. Para ello, se debe salir de la zona de confort que poseemos y experimentar nuevas actividades, y si nos equivocamos, rectificar sin decaer en el intento.
Para ser creativo necesitamos de tres
instrumentos básicos: Capacidad de conexión, adaptarse de modo activo a los
cambios y estar motivado para tener una actitud activa hacia la curiosidad.
El segundo día amaneció diluviando, llegamos al
centro empapados de arriba abajo. Secamos calcetines, botas, abrigos y demás
ropa mojada con estufas; y la sesión la realizamos descalzos. Eso nos unió en
un gran grupo de personas que apenas se conocían. Dicha sesión comenzó con un
vídeo muy interesante sobre la creatividad de Ken Robinson. En donde planteaba
si la escuela estaba acabando con la creatividad.
Después, realizamos varios juegos, no solo para
aumentar nuestra creatividad y estar más atentos a todo lo que nos rodea; sino
para que los participantes nos conociésemos mejor. Se trataba de presentarse
entre nosotros, dándonos la mano, pero en ese momento perdías tu nombre y te
quedabas con el del compañero al que habías saludado. Debías seguir saludando
compañeros (y quedándote con su nombre) hasta que te reencontraras con tu
nombre al saludar a otro compañero. Supe divertido, porque nos mantuvo alerta
de conocer los nombres de cada compañero. Entendimos que necesitamos ser más
conscientes de lo que nos rodea para fijarnos en algo que nos haga ser
creativos. Todo está creado, solo hay que verlo desde otro punto de vista desde
otro modo de pensar, sin temor a equivocarnos; por ello, la misma obra de arte
o paisajes u objetos nos aporta diferentes sentimientos y pensamientos. En lo
cual también participa el entorno donde creamos: la luz, la temperatura del
lugar, el color, el mobiliario, …
La tercera sesión la comenzamos con el
pensamiento creativo in situ. Realizamos varios juegos relacionados con este
aspecto. El primero trataba de señalar un objeto de la clase y nombrarlo de
otro modo que no fuese su nombre correcto; por ejemplo, señalar una silla y
decir cuadro. Muy animados jugamos un buen rato. Un segundo juego consistía en
describir los usos que podía tener un objeto, una cuchara, que no fuese comer:
cepillo, violín, lapicero, secador de pelo, corbata, …. Dijimos muchísimos
usos, cada participante dijo hasta tres usos diferentes. Después, en parejas,
decidimos qué usos reales podía tener una cuchara que no fuese solo comer, como
pulseras de plata, hacer música, carreras de huevos, espejo, pala para plantar
macetas, …; posteriormente todo se ponía en común con el gran grupo y
reflexionábamos sobre nuestras elecciones. Otro juego trataba de relacionar una
lista de conceptos abstractos (elegidos por nosotros) con objetos reales, y
crear oraciones con sentido; por ejemplo: la pasión es como una máquina de
café, porque la pasión te hace ser fuerte como un buen café.
Metidos de lleno en la tarea en la creatividad,
la siguiente actividad de la sesión fue describir tu ciudad si fuese una
persona. Cada uno leyó su descripción y eres consciente de que podemos ser muy
creativos estando motivados en ello.
Con la siguiente actividad nos reímos mucho, se
trataba de crear un anuncio publicitario sobre un objeto y una cualidad
escritas por nosotros en pequeños trozos de papel. En grupos de tres y en quince
minutos teníamos que crear y representar el anuncio. A mi grupo le tocó coche y
rápido. Para realizar el anuncio nos basamos en nuestras experiencias
personales y nuestro idioma: “Cochevel” (coche veloz) elegimos el castellano
por la fuerza que tiene su pronunciación y decidimos que para vender un coche
lo mejor es compararlo con el viaje de metro en Roma por las mañanas (apretados
como piojos en costura) y el diluvio del día anterior. Sin duda un buen spot
que habría vendido muchas unidades de “Cochevel”.
La última actividad de la sesión consistió en crear en el aula un lugar confortable para que tenga lugar una cena de Navidad. Ahí comenzó el pensamiento, de unos más que de otros, a crear y crear. De la sala del piso superior cogimos una maceta con plantas, pusimos unas tablas con caballetes haciendo de mesa, cogimos prestados espumillones del centro, los bolígrafos hicieron de cubiertos, sacamos las galletas que llevábamos por los bolsos, cogimos papel del baño e hicimos rosas simulando servilletas, pusimos el proyector con imágenes de Navidad y canciones. Sin ningún lugar de dudas, ganamos al otro equipo.
Por la tarde tendría lugar una actividad
cultural libre con la visita al coliseo y los Foros Palatino e Imperiales,
haciendo uso de la tarjeta Romapass.
La cuarta sesión, 7 de diciembre de 2023, comenzó escribiendo cómo nos sentíamos ese día; tras ponerlo en común, comenzamos con las actividades. La primera fue hacer un collage sobre nuestra profesión, sobre cómo nos sentimos, cómo trabajamos, cual es el fin de dicho trabajo y cómo llegamos a él, siempre bajo la legislación.
Tras su realización, nos dividimos en grupos de
cuatro participantes para explicarla y reflexionar sobre ello, para
posteriormente ponerla en común con el gran grupo.
En esta sesión, la parte teórica, consistió en
conocer qué tipo de actor creativo éramos: Artista, pensador, aventurero,
realizador, productor, soñador, innovador o visionario. Para ello hicimos un
test online en www.mycreativetype.com, entretenido y eficaz,
al menos en mi persona acertó de lleno. Realizador, creativo comprometido con su
capacidad de crear. Descubrimos que en muchos momentos las personas creativas
necesitan de otros para que el proceso de crear y resolver problemas sea
efectivo.
La siguiente actividad consistió en crear con piezas lego, y en grupos de seis participantes, un coche. Creamos un coche galáctico donde estábamos representados todos los participantes y nuestra profesora, Mafalda.
Para finalizar las actividades creamos un poema
de alfabeto, en donde escribimos entre todos un poema con el alfabeto con las
palabras usadas en el curso.
El curso terminó con la entrega de certificados
e intercambios de teléfonos con los compañeros.
La
hora de salida de las sesiones solía ser sobre las dos y media de la tarde. En
mi caso, por las tardes, me dedicaba a hacer turismo por esa hermosa ciudad que
acababa de inaugurar su alumbrado navideño, disfrutar de su comida y descubrir
pequeños y encantadores rincones.
Mi reflexión sobre el curso es que ha sido una oportunidad única de compaginar el aprendizaje de nuevas formas de metodología creativa y conocer otra cultura, cercana, pero muy diferente. Ha sido gratificante el compartir experiencias de otros compañeros de diferentes países, con quienes compartimos los mismos problemas y motivaciones en su aspecto profesional.
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